Desde donde estamos contemplo ensimismada oro sobre plata, verde que se apaga, reflejos sobre la bruma, colores que se van transformando .El sol cansado se retira tras el horizonte en este atardecer otoñal.
Brillantes luciernagas intentaran suplir al rey que se ha ido.
Entonces con delicadeza, despacio, casi instintivo me cobijas en tu regazo y te exclamo al oido ¡tengo frío!, cojes mis manos y un beso furtivo estampo en tus ojos, no hacen falta palabras, este silencio "grita" a mis oidos todos los instantes vividos...ya asoma la luna.
Rocío sobre las ropas, es la hora, nuestra hora, horas vividas, días pasados, años de preguntas ¿soy feliz? y años de respuestas: lo estoy intentando.
Tranquilidad, sosiego , murmullos de gentes, retirada a ritmo lento tras un día monótono y repetido ...tanta banalidad cuándo en mi interior existe la certeza de que sin tu abrazo mañana el sol no daría luz a mí día.
Volvamos, abrazados viendo pasar los recuerdos y descubriendo un futuro.
Tesy
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